
Preeclampsia: causas, síntomas, factores de riesgo y tratamiento

- ¿Qué es la preeclampsia?
- ¿Qué causa la preeclampsia?
- Signos y síntomas de la preeclampsia
- ¿Cuáles son los factores de riesgo de la preeclampsia?
- ¿Cómo puede la preeclampsia afectar a la madre y al bebé?
- ¿Cuál es la tasa de mortalidad debido a la preeclampsia?
- ¿Cómo se puede controlar la preeclampsia?
- Preguntas frecuentes
Diferentes tipos de complicaciones, ya sean físicas, fisiológicas o psicológicas, pueden afectar a la futura madre durante el embarazo. La preeclampsia es una de esas complicaciones del embarazo. La presión arterial alta es el síntoma principal de esta afección del embarazo potencialmente mortal.
Si bien no sabemos con certeza qué desencadena la preeclampsia, existen varios factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar la afección en mayor medida que en otras mujeres. Los controles prenatales son fundamentales para la prevención y el tratamiento de complicaciones como la preeclampsia durante el embarazo.
En este artículo
- ¿Qué es la preeclampsia?
- ¿Qué causa la preeclampsia?
- Signos y síntomas de la preeclampsia
- ¿Cuáles son los factores de riesgo de la preeclampsia?
- ¿Cómo puede la preeclampsia afectar a la madre y al bebé?
- ¿Cuál es la tasa de mortalidad debido a la preeclampsia?
- ¿Cómo se puede controlar la preeclampsia?
- Preguntas frecuentes
¿Qué es la preeclampsia?
La preeclampsia es una afección que se presenta solo durante el embarazo y aparece principalmente después de la semana 20 de gestación . Muy raramente, también se informa antes de la semana 20 de gestación. La preeclampsia se caracteriza por presión arterial alta incluso si la futura madre no tiene antecedentes de presión arterial (inducida por el embarazo). El nivel de proteína en la orina también aumenta significativamente. Las mujeres con preeclampsia también desarrollan hinchazón en los pies, las piernas y las manos.
Si la preeclampsia no se detecta, puede evolucionar hacia la siguiente etapa, llamada eclampsia, que puede poner en peligro la vida de la madre y del niño. Como no existe una forma infalible de tratar la preeclampsia, la única forma de protegerse es informarse sobre los síntomas y acudir a controles prenatales regulares para poder detectar la afección de forma temprana y tomar las medidas necesarias. Cuanto antes se detecte, más fácil será controlarla.
¿Qué causa la preeclampsia?
Aunque no se conoce la causa exacta de la preeclampsia y la eclampsia, se cree que es consecuencia de un mal funcionamiento de la placenta. La reducción del flujo sanguíneo a la placenta es la causa principal de la preeclampsia, aunque algunos expertos creen que la mala nutrición y el exceso de grasa corporal también pueden ser responsables de la afección.
Esto puede suceder si:
- La placenta no está correctamente insertada en el revestimiento del útero.
- Los vasos sanguíneos están menos dilatados disminuyendo el flujo de sangre a la placenta.
- Hay un problema con el sistema inmunológico de la madre.
- La genética también juega un papel
- La anemia durante el embarazo también puede aumentar el riesgo de preeclampsia
Signos y síntomas de la preeclampsia
Los signos y síntomas de la preeclampsia incluyen:
- Presión arterial alta: después de la semana 20 de embarazo, incluso un aumento leve de la presión arterial puede ser un indicio de preeclampsia. La presión arterial alta es una de las principales señales de alerta de la preeclampsia. Una presión arterial de 140/90 mm Hg o más, tomada en dos ocasiones con una diferencia de al menos cuatro horas, se considera anormal (120/80 mm Hg es una lectura normal).
- Proteinuria: La presencia de proteínas en la orina de la madre es otro símbolo de la preeclampsia. Las proteínas están restringidas en el torrente sanguíneo debido al proceso de filtrado que realizan los riñones. La preeclampsia altera el proceso de filtrado, lo que provoca la pérdida de diferentes proteínas, como la albúmina, a través de la orina.
- Náuseas y vómitos: las náuseas y los vómitos frecuentes son un signo importante de preeclampsia que aparece alrededor del abdomen durante el embarazo. Como todos los signos de las náuseas matutinas están desapareciendo, la aparición/reaparición repentina de estos signos indica un inicio repentino de preeclampsia.
- Dolor de cabeza intenso: un dolor de cabeza intenso, punzante y persistente acompañado de presión arterial alta puede ser un signo de preeclampsia.
- Dolor abdominal, de hombros y de espalda baja: el dolor de hombro que se irradia desde las costillas derechas, el dolor agudo y focalizado en la espalda baja y el dolor de hombro a lo largo de la tira del sostén o el cuello pueden ser una indicación de problemas hepáticos asociados con la preeclampsia.
- Edema : la cara, los ojos y las extremidades se ven excesivamente hinchados y, si presiona el pulgar sobre la hinchazón, la impresión permanecerá durante unos segundos. Este edema con fóvea puede ser un indicio de preeclampsia.
- Cambios en la visión: Los cambios regulares en la visión en la empresa, vibraciones de aura, luces brillantes, sensibilidad a la luz, visión borrosa, etc. pueden ser una indicación de hinchazón en el cerebro o irritación del sistema nervioso central que se asocia comúnmente con la preeclampsia.
- Dificultad para respirar: La dificultad para respirar y el aumento de la frecuencia cardíaca pueden ser signos vitales de preeclampsia.
- Trombocitopenia: La deficiencia de plaquetas sanguíneas, trombocitopenia, es un indicio de preeclampsia.
- Aumento repentino de peso: el aumento repentino de peso en una semana puede deberse al exceso de agua atrapada en el tejido corporal. Esto puede deberse al daño que se produjo en los vasos sanguíneos debido a la preeclampsia.
- Disminución de la micción: Una disminución en la frecuencia y la cantidad de micción puede ser un indicio de preeclampsia.
¿Cuáles son los factores de riesgo de la preeclampsia?
Hay ciertos factores que aumentan el riesgo de preeclampsia.
- Edad: El embarazo adolescente o quedar embarazada después de los 40 años aumenta las probabilidades de padecer preeclampsia
- Primer embarazo: La preeclampsia se encuentra con mayor frecuencia durante el primer embarazo.
- Embarazos múltiples: Estar embarazada de gemelos o más bebés aumenta el riesgo de preeclampsia
- Antecedentes de la madre: Poseer una determinada condición antes de quedar embarazada, como hipertensión crónica, diabetes, enfermedad renal, enfermedades de la coagulación sanguínea, artritis reumatoide, etc. aumenta el riesgo de preeclampsia.
- Enfermedades autoinmunes: Si la mujer embarazada tiene enfermedades autoinmunes como el lupus, las probabilidades de padecer preeclampsia aumentan.
- Si el embarazo no es natural: Si el embarazo se debe a inseminación artificial o a través de donación de óvulos, las probabilidades de preeclampsia aumentan.
- Obesidad: Tener sobrepeso antes del embarazo y durante el mismo aumenta el riesgo de preeclampsia
- Antecedentes familiares: Los antecedentes familiares de preeclampsia (abuela, madre, tía o hermana) aumentan el riesgo de padecerla.
- Antecedentes de preeclampsia: Una de cada seis mujeres embarazadas que han tenido preeclampsia durante su embarazo anterior, aumenta sus probabilidades de sufrirla en el siguiente embarazo. En caso de que la preeclampsia sufrida en el último embarazo haya sido muy grave y haya aparecido antes de la semana 30 de embarazo, el riesgo de sufrirla en el siguiente embarazo aumentará hasta un 40%.
- La brecha entre embarazos: si la brecha entre los embarazos es de más de diez años o menos de dos años, el riesgo de preeclampsia aumenta.
- Nuevas parejas: tener un bebé con una nueva pareja cada vez que estás embarazada la pone en mayor riesgo de desarrollar preeclampsia.
¿Cómo puede la preeclampsia afectar a la madre y al bebé?
La preeclampsia puede provocar un desprendimiento de la placenta , que es la separación repentina de la placenta del útero. También puede provocar enfermedades cardiovasculares, eclampsia y síndrome HELLP (hemólisis: destrucción de glóbulos rojos, aumento de las enzimas hepáticas y bajo recuento de plaquetas).
La disminución significativa del flujo sanguíneo hacia la placenta reducirá, a su vez, la disponibilidad de oxígeno y nutrientes para el feto. Esto puede provocar:
- Bajo peso al nacer
- Retraso del crecimiento
- Nacimiento prematuro
- Crecimiento lento
- Discapacidades de aprendizaje
- Problemas de audición y visión
- Epilepsia y parálisis cerebral
También puede aumentar la probabilidad de infección (materna) después del parto, causando a veces complicaciones raras pero graves, como accidentes cerebrovasculares, convulsiones, insuficiencia cardíaca, agua en los pulmones y sangrado después del parto.
¿Cuál es la tasa de mortalidad debido a la preeclampsia?
Se estima que alrededor de un millón de mujeres desarrollan preeclampsia cada año en todo el mundo. De ellas, alrededor de 76.000 madres mueren.
¿Cómo se puede controlar la preeclampsia?
Como no existe ningún tratamiento para la preeclampsia, aparte del parto, es importante aprender a controlarla. Una vez que se le diagnostique preeclampsia, su médico la controlará de cerca.
Descansar, aumentar la ingesta de líquidos, disminuir la ingesta de sal y someterse a exámenes regulares por parte del médico son algunas de las medidas que ayudan a controlar la preeclampsia.
Es posible que deba permanecer en el hospital y el médico:
- Tómese la presión arterial periódicamente
- Administre su medicamento para bajar la presión arterial
- Realizar una ecografía Doppler para medir el flujo sanguíneo desde la placenta hasta el bebé.
Si su condición es grave, será ingresada en el hospital durante el resto del período de gestación y un equipo de expertos:
- Realizar análisis de sangre frecuentes
- Vigile constantemente la presión arterial
- Controlar el nivel del líquido
- Realizar periódicamente cardiotocografía (latidos cardíacos fetales)
- Le administrarán un goteo de sulfato de magnesio para reducir el riesgo de eclampsia.
Recuerda que la única cura para la preeclampsia y la eclampsia es el parto, que depende de la etapa del embarazo en la que te encuentres. Si tu bebé se ha desarrollado lo suficiente y estás cerca de la semana 37 de gestación, se puede realizar un parto inducido o una cesárea para combatir los efectos de la preeclampsia. En caso de que el bebé no esté cerca de nacer, se realizará un seguimiento estricto hasta que se desarrolle lo suficiente para poder nacer. Recuerda que cuanto más cerca de la fecha prevista de parto esté tu bebé, mejor será para él.
Como ya hemos dicho, el parto es la única forma de deshacerse de la preeclampsia. El médico inducirá el parto (si es necesario) para que el riesgo del parto, la salud del bebé y la salud de la madre se vean lo menos afectadas.
Preguntas frecuentes
1. ¿Pueden los ejercicios regulares ayudar con la preeclampsia?
Sí, puede ser posible. Hacer ejercicio de forma regular puede ayudar a mantener la presión arterial. El ejercicio también es beneficioso para el embarazo en otros aspectos.
2. ¿Cómo puedo prevenir la preeclampsia?
Se desconoce la causa exacta de la preeclampsia, por lo que es difícil prevenirla. Mantener un estilo de vida equilibrado durante el embarazo puede ayudar.
3. ¿Las náuseas matinales intensas pueden indicar preeclampsia?
Sí, puede ser así. Es uno de los síntomas. Si las náuseas matutinas no desaparecen, debes hacerte una prueba para ver si tienes preeclampsia.
4. ¿Pueden mis dolores de cabeza durante el embarazo indicar preeclampsia?
No, puede que no lo sea. Los dolores de cabeza durante el embarazo son comunes. La preeclampsia incluye presión arterial alta.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.